Entrada 38: 400 euros, y con ganas de volver a casa

Durante un tiempo, pensé en dejar de escribir en el blog. Creo que las ganas y la calidad de lo que cuentas disminuye con la estabilidad. Es bien conocido, que un artista hace sus mejores obras cuando esta más hundido, y como claro ejemplo esta Joaquín Sabina, cuyo mejor disco es de la época más dolorosa de su vida. En mis malos momentos tenía muchas ganas de contar mis penas, porque contar esas cosas hace que las puedas ver desde fuera, y empequeñecerlas. Ahora que lo peor ha pasado (aunque otras cosas malas están en camino), las ganas de escribir aquí han decaído. Y justo en ese momento, alguien hace un comentario en una entrada, y ves que a pesar de lo que tu pienses, hay gente, no sabes muy bien porque, que quiere que sigas escribiendo. Pues eso es suficiente para que te entren ganas de escribir, y a ello voy!

Relamente mi vida no ha cambiado mucho desde la última vez que escribí. Ahora estoy escribiendo desde un hotel de 2 estrellas, con el mismo estampado en las cortinas, colchas y mantel, en un pueblo perdido en las montañas. Sigo 900 km de mi casa, y ya tengo ganas de volver. Estoy ganando dinero, no me lo paso mal, tengo tiempo para mis cosas... pero echo de menos tantas cosas... y eso que en mi casa las cosas no están en su mejor momento. Mi madre tiene cita con un abogado la semana que viene, y aunque esta claro que mi familia está rota, me alegro que todos excepto uno estemos en el mismo lado.

Y no se si será por la soledad de los hoteles, pero también estoy empezando e echar de menos otras cosas, y no solo sexuales. Para mi, cuando se tiene pareja y se está bien, se es más feliz, y hecho de menos las cosas que se hacen con la pareja, la complicidad, las miradas que dicen tanto... Se que aun me queda bastante para volver a tener pareja, y se que no es bueno querer tenerla, pero es lo que hay. Eso no quita que si me cruzo una chica maja no me vaya a liar con ella una noche y ya está, que fisiológicamente uno tiene sus necesidades también!

Otra de las cosas malas de estar fuera es la comida. No digo que aquí se coma mal, pero si puedo decir que de tanto comer fuera se engorda, y bastante. Yo he engordado unos 4 kilos, y encima no estoy haciendo nada de deporte, en parte por una lesión que tengo en el dedo. Podría salir a correr, pero el frío, el tener que hacerlo de noche, el tener proyectos fuera del trabajo y otras cosas, hacen que al final no haga nada de nada. Por lo menos tal vez mañana vaya a esquiar por primera vez en mi vida, a una estación cercana al pueblo. Nunca he esquiado, y la verdad es que me apetece bastante aprender.

Mis proyectos personales van avanzando. La página que estoy haciendo esta casi terminada, a falta de unos retoques (no se porque, creo que llevo demasiado tiempo en ese estado de solo retoques), el juego para android va mejorando en jugabilidad, aunque aun falta la parte gráfica que no me corresponde a mi, y ya tengo en mente el siguiente juego... del que no diré nada aún. La universidad sigue donde está, de vez en cuando pasa por mi cabeza, pero no me puedo poner a estudiar aquí, me es imposible. Esperemos que al volver me ponga las pilas.

Y de momento poco más puedo contar, nada de chicas, los fines de semana aburridos, y mucho trabajo.
Espero volver a escribir pronto...